La tetraplejia por negligencia médica es más común de lo que pudiera parecer. Se trata de una de las lesiones más graves que puede provocar un fallo sanitario y, por supuesto, origina el derecho a reclamar una indemnización.
El problema es que reclamar una negligencia sanitaria no suele ser sencillo. Por eso es recomendable contactar con profesionales especializados en el sector. Con su ayuda será más fácil lograr una indemnización que cubra los gastos derivados de una tetraplejia por negligencia médica y, en su caso, exigir la responsabilidad penal del sanitario negligente.
¿Qué es la tetraplejia por negligencia médica?
La tetraplejia por negligencia médica consiste en una lesión de la médula espinal de suficiente entidad como para provocar la paralización de las extremidades del cuerpo. Esta parálisis puede ser completa o parcial y suele afectar también al torso del paciente. Además va acompañada de la pérdida sensorial, limitación de la función sexual y problemas asociados a la respiración, digestión y control de vejiga e intestinos entre otros…
Por tanto, es una de las lesiones más graves dentro de la mala praxis sanitaria. Y pese a ello, más de un centenar de negligencias médicas concluyeron durante el año pasado con resultado de tetraplejia o paraplejia.
¿Cómo puede producirse la tetraplejia por negligencia médica?
La tetraplejia puede traer causa de diferentes enfermedades, como la mielitis transversa o la esclerosis múltiple. En el caso de los recién nacidos puede derivarse de hipoxias neonatales o perinatales, sea a causa de infecciones o incluso de complicaciones intraparto.
Pese a ello, las causas más comunes de la tetraplejia derivan de accidentes laborales o de tráfico. Pero, incluso en estos casos, la asistencia sanitaria es fundamental para minimizar los daños ocasionados.
Tengamos en cuenta que la asistencia médica se inicia en la fase de diagnóstico. Dicho de otro modo, el retraso en un diagnóstico, una lista de espera excesiva o una intervención tardía pueden ser causa de una tetraplejia por negligencia médica. Por ejemplo, no detectar un derrame cerebral u otras enfermedades relacionadas con la médula espinal a tiempo puede suponer una conducta negligente.
Otro de los momentos en que puede producirse la tetraplejia por negligencia médica es durante la propia intervención sanitaria. Esta puede asociarse a una anestesia mal gestionada o a punciones (por ejemplo para aplicar la anestesia epidural) mal realizadas.
Las intervenciones quirúrgicas son otro foco de riesgo. Así, la tetraplejia puede derivar de una lesión provocada durante la intervención de una hernia cervical o discal.
Indemnización por tetraplejia: ¿Cómo reclamarla?
Hemos dedicado varios artículos a explicar cómo reclamar la responsabilidad civil por negligencia médica, la responsabilidad patrimonial sanitaria e incluso los daños morales en el proceso sanitario.
Como se deriva de estas entradas, la reclamación de tetraplejia por negligencia médica requiere de cierta pericia y experiencia en el campo de las negligencias médicas en general. Además, es necesaria la intervención de abogados especializados en la materia y de peritos sanitarios.
Siempre que se cuente con la asesoría adecuada se podrá determinar el alcance de las lesiones, su correspondiente indemnización y la relación entre el servicio sanitario y la patología padecida. Estas operaciones son clave en la reclamación de una tetraplejia por negligencia médica.
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