La epilepsia en el parto puede ser consecuencia de una negligencia médica. Se trata de un trastorno neurológico acompañado de convulsiones y un funcionamiento anormal del sistema nervioso, que puede llegar incluso a provocar la inconsciencia del paciente.
En muchos casos la epilepsia resulta irreversible e impide llevar un estilo de vida normal.
La atención sanitaria se convierte en una necesidad permanente de quien la padece. Precisamente por ello es importante reclamar una indemnización en aquellos casos en que una negligencia médica en el parto provoque una epilepsia al neonato. La familia necesitará los medios obtenidos por medio de la indemnización, requeridos para costear gastos sanitarios y las adaptaciones que vaya a necesitar el infante.
Causas de la epilepsia en el parto
La epilepsia no tiene por qué derivar necesariamente de una negligencia médica. Sin embargo, es frecuente que se produzca en aquellos casos en que el bebé se ha visto privado de oxígeno durante un período crítico.
Conocemos estos episodios como hipoxia, y pueden traer causa de diferentes complicaciones en el parto. Por ejemplo, lesiones del cordón umbilical, complicaciones uterinas, una presión arterial excesiva o la utilización indebida de técnicas e instrumentos de asistencia al parto.
También puede provocar esta dolencia una hemorragia intracraneal, una infección o un exceso de bilirrubina.
En definitiva, existen diferentes causas que pueden conducir a un cuadro de epilepsia durante el alumbramiento. Afortunadamente, los equipos clínicos disponen de tratamientos adecuados para detectar precozmente estas causas y minimizar sus efectos.
Y precisamente por ello es importante que los médicos reaccionen a tiempo y monitoricen el estado del bebé. En caso contrario podríamos estar ante una negligencia médica en el parto, cuestión que nos debería llevar a dirimir responsabilidades.
¿Cómo reaccionar ante una negligencia médica en el parto que provoque epilepsia?
A la hora de determinar si se ha producido o no una negligencia médica en el parto es fundamental conocer las circunstancias del alumbramiento, los protocolos aplicables y la adecuación de la conducta de los sanitarios a tales protocolos.
Esta tarea debe dejarse en manos de técnicos sanitarios. Por eso, los abogados especializados en negligencias médicas en partos trabajamos codo con codo con peritos médicos de confianza.
Lo mejor en estos casos en buscar ayuda profesional
Si el perito observa indicios de negligencia empezará la tarea del abogado. Nuestra misión será reclamar al centro sanitario, sus profesionales y la aseguradora una indemnización que garantice una calidad de vida adecuada al neonato.
Las reclamaciones comenzarán por la vía amistosa, tratando de llegar a un acuerdo extrajudicial. Si los responsables no ofrecen una indemnización adecuada acudiremos a los Tribunales, donde presentaremos una demanda civil.
En ningún caso una indemnización puede compensar la epilepsia causada en el parto por una negligencia médica. Sin embargo, la familia no tiene por qué cargar con los costes económicos que implicarán las complicaciones sanitarias provocadas por el facultativo negligente. Por eso consideramos imprescindible que en estos casos se contacte lo antes posible con un especialista en la materia. Y tenemos nuestras puertas abiertas para quien esté atravesando esta desagradable situación.