Las negligencias médicas en el parto por falta de información son más corrientes de lo que cabría esperar o desear. Y es que uno de los pilares de nuestro sistema sanitario es la información al paciente.
Quien se somete a una intervención debe conocer previamente sus expectativas de éxito y sus riesgos. Generalmente debe tener el derecho a decidir si quiere acogerse o no al tratamiento, aunque los casos de riesgo vital o grave e irreversible pueden suponer excepciones.
Pero también existe la posibilidad de que sea el equipo sanitario quien carece de la información necesaria para abordar el caso diligente y eficazmente. Por ejemplo, cuando ha habido un error en el diagnóstico o se interviene de urgencia sin conocer el historial u otros datos relevantes del paciente.
En cualquier caso, las negligencias médicas en el parto por falta de información dan derecho a ejercitar las reclamaciones oportunas. Si bien una indemnización nunca va a ser capaz de reparar una lesión corporal, lo cierto es que de esta suelen derivarse gastos, molestias e inconvenientes. De modo que exigir una indemnización no deja de ser un modo de compensar el sufrimiento y, sobre todo, garantizar que la víctima no quede desprotegida.
Negligencias médicas provocadas por falta de información
Como indicamos, las negligencias médicas en el parto por falta de información provienen de dos fuentes:
Cuando la falta de información afecta al equipo sanitario
El desconocimiento de los médicos suele provenir de problemas en el diagnóstico. Puede que se haya realizado incorrectamente, que no se haya trasladado el historial clínico o que este esté incompleto o sea malinterpretado.
En todo caso, el equipo sanitario necesita conocer tantos detalles clínicos del paciente como sea posible. De modo que si desconoce algún factor clínico es probable que su actuación conduzca a una lesión.
Pero el paciente no tiene en ningún caso que soportar una actuación incorrecta. Si la negligencia no es achacable al equipo interventor, al menos lo será al responsable del diagnóstico o la tramitación del historial clínico.
Cuando la falta de información afecta al paciente
En estos casos entra en juego la cuestión del consentimiento informado, sobre la que ya hemos hablado en otras ocasiones.
El consentimiento informado es el derecho que tiene el paciente a conocer el tratamiento prescrito por el equipo de salud, pero también sus consecuencias. Es decir, sus posibilidades de éxito y los riesgos y efectos secundarios del mismo.
Si se hace hincapié en esta cuestión es, precisamente, porque el paciente debe tener la posibilidad de oponerse a aquellos tratamientos que considere extremadamente perjudiciales o contrarios a sus principios o intereses.
Afectado por negligencia médica como consecuencia de falta de información. ¿Qué se puede hacer frente a este tipo de situaciones?
La negligencia médica en el parto por falta de información concede a la persona afectada la posibilidad de reclamar una indemnización por las secuelas derivadas de esa falta de información (Sufrimiento fetal, Encefalopatía hipóxico-isquémica, lesión del plexo braquial…).Para ello, lo más recomendable es contactar con un despacho especializado.
Durante las primeras etapas del proceso se deberá reunir toda la documentación y realizar observaciones clínicas, tanto al perjudicado como a las circunstancias concurrentes en el caso. De esta etapa emanará un análisis de viabilidad y una primera determinación de la gravedad de las secuelas y la cuantía de la indemnización.
Si necesita reclamar una negligencia médica en el parto estaremos encantados de valorar su caso y prestarle toda la atención que requiera. Contamos con más de 20 años de experiencia en la materia.